Falsa alarma. Una hebilla de cinturón con forma de granada ha provocado este miércoles el desalojo de las estaciones de Atocha (Madrid) y Sants (Barcelona) después de una mañana caótica en la que se ha llegado a suspender el servicio de trenes por una amenaza de bomba.
Fuentes de Interior han confirmado que el operativo policial que se ha llevado a cabo en la estación madrileña de Atocha ha sido consecuencia del que ha tenido lugar en Sants, donde los Mossos D’Esquadra han recibido a primera hora el aviso de un posible artefacto explosivo. Las mismas fuentes han asegurado que en ambos casos se ha debido a una falsa alarma.
Dicho artefacto estaba en el interior de la maleta de una mujer que no pudo ser interceptada tras el control de seguridad en Sants. La sospechosa se subió a un tren AVE con dirección Madrid, donde ha sido identificada. Ya en Atocha se ha comprobado que no era un explosivo sino un cinturón, cuya hebilla en forma de granada alertó a la seguridad de la estación de Sants.
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